Biografía

Anécdotas, vivencias, ...

Coro del colegio menor dirigido por Alejandro Yagüe

Colegio Menor Generalísimo Franco de Burgos (1966)

Alejandro Yagüe. Palacios de la Sierra (1947)

Madrid- Televisión colegio Niño Jesús- Marianistas (1960)

Marianistas. Valladolid (1958)

VER BIOGRAFÍA COMPLETA

Coro del colegio menor dirigido por Alejandro Yagüe

Colegio Menor Generalísimo Franco de Burgos (1966)

Alejandro Yagüe. Palacios de la Sierra (1947)

Madrid- Televisión colegio Niño Jesús- Marianistas (1960)

Marianistas. Valladolid (1958)

VER BIOGRAFÍA COMPLETA

Nacimiento

(Foto- Palacios de la Sierra- 1947)

El padre de Alejandro Yagüe, Palmiro Yagüe de Miguel, trabajó en la década de los 40 como guardia forestal en Palacios de la Sierra, lugar en el que nace Alejandro el 27 de febrero de 1947 donde vive hasta que tiene cuatro años. Los primeros pájaros que oyó cantar eran palacianos, influyendo de alguna manera en su forma de componer. En 1951 la familia se traslada a Santa Cruz de Juarros.1947

Primeros años

(Foto- Alejandro de pequeño)

En Santa Cruz de Juarros Alejandro se pasaba los días enteros dibujando en una pizarra. En una visita del maestro de la escuela a la casa familiar vio pintada en dicha pizarra la Catedral de Burgos. Felicitó a su padre pensando que fuese el autor, y se sorprendió cuando se enteró de que había sido el propio Alejandro de siete años quien lo había dibujado. El maestro le indicó a su padre que le llevara a estudiar lo antes posible a una Academia de Dibujo afirmando que llegaría a ser un gran pintor burgalés. En la escuela de Santa Cruz jamás les habían hablado de música. Alejandro pintaba todo lo que caía en sus manos. Le llamaba mucho la atención unos bosquejos que él llamaba dibujos extraños. Tales trazados venían en las postales de felicitación navideña. Eran dibujos con cinco rayas paralelas, sobre las que había unos pequeños círculos negros del tamaño de una cabeza de alfiler con una especie de rabitos. Le gustaba pintar aquellas cosas misteriosas.1951

Viaje a Valladolid

(Foto- Marianistas. Valladolid. 1958. El niño que sostiene la pelota)

Alejandro con 10 años salió en autobús de Santa Cruz de Juarros con destino al Postulantado Marianista de la Rubia en Valladolid. Allí coincidirá con otros niños de todas las regiones de España. No verá de nuevo a sus padres hasta las vacaciones del próximo verano.1958

Su inicio en la música

(Foto- Madrid- Televisión Colegio Niño Jesús-Marianistas)

Alejandro siempre recordaría el primer día que entró en la capilla del internado en Valladolid. Un Marianista llamado Antonio Bringas comenzó a dirigir el coro del Postulantado. Alejandro quedó totalmente impresionado por el sonido que le alcanzaba. Estaba colocado detrás de los mayores (tenores-bajos) y el efecto acústico que le llegaba a sus oídos era extraordinario. De hecho, jamás lo olvidó en la composición de sus obras policorales. Eso hizo que se animase formar parte del coro. Un día, Don Donato les dijo que les iba a enseñar música y cuál no sería su sorpresa cuando el profesor empezó a pintar en la pizarra los mismos dibujos extraños que él pintaba en su pizarra de Santa Cruz.  Resulta que aquello se llamaba… ¡música! La música era el arte de hacer dibujos extraños y el mejor dibujante acabaría siendo el mejor músico. Muy pronto le recomendaron pertenecer a la rondalla del internado. En pocas semanas, Alejandro aprendió a tocar la guitarra. Destacó en la actuación conjunta del coro y rondalla Marianista en Madrid, en Televisión Española.  Transcurrían los años 60 cuando este organismo daba sus primeros pasos en el Paseo de la Habana. También en Madrid dieron 14 conciertos más. Desde un punto de vista muy personal, la ilusión de Yagüe era ser pianista y, posteriormente, sus esfuerzos se centraron en el piano.Años 60

Descubrir su vocación

(Foto- Valladolid, Marianistas)

A continuación, se trasladó al noviciado de Ávila, donde realizó las tareas de organista en un pequeño armonio. Pero su vocación no era ser fraile. Por ello, el lunes 17 de agosto de 1964 salió del noviciado marianista y volvió a Burgos. En septiembre ese mismo año su padre le matriculó en sexto curso de bachillerato en el Cardenal López de Mendoza, aunque Alejandro ya había decidido ser músico. Poco a poco fue conociendo por su cuenta la vida cultural de Burgos.1964

La inmersión en sus estudios musicales

(Foto- Colegio Menor Generalísimo Franco de Burgos- 1966)

En sexto curso se estudiaba Historia del Arte, pero el único arte que no se estudiaba era el musical. Un día Alejandro vio a un joven que llevaba un violín por la calle Laín Calvo. Le fue siguiendo y se dio cuenta de que entraba en la Academia Municipal (origen del actual Conservatorio Municipal de Música). En abril de 1965, a sus dieciocho años, se presentó en casa del maestro Ángel Juan Quesada, director de la Academia, para explicarle que quería estudiar allí. Alejandro había sido autodidacta y no tenía ningún estudio musical reglado, por lo que Quesada le desalentó de su intento. Pero, Alejandro le presentó una composición suya e inmediatamente el director le indicó que se matriculase en el centro. Alejandro cursó Magisterio donde estudió la asignatura de Música. Mientras tanto se hospedó en el Colegio Menor Generalísimo Franco de Burgos. Al finalizar segundo de Magisterio le concedieron una beca para realizar un curso de pedagogía musical en Madrid. Terminó sus estudios de Magisterio con Sobresaliente y Premio Extraordinario. El Ministerio de Educación convocó un concurso nacional entre Escuelas de  Magisterio, en la que Alejandro consiguió el Premio Nacional Fin de carrera de Magisterio (B.O.E., 10 de abril de 1969) En el curso 1968-69 no se convocaron oposiciones de magisterio y estuvo contratado de profesor de Educación Física en el colegio de los Jesuitas. En el Conservatorio de Burgos continuó sus estudios de piano, y por su cuenta empezaba los estudios de armonía.1965

Ingenioso estudiante

(Foto- Alejandro Yagüe dando un concierto de piano)

Durante el verano de 1966 Alejandro trabajó en el campo petrolífero de Sargentes de la Lora y durante el verano siguiente en las minas de cobre de Huidobro. Durante sus vacaciones, Alejandro tenía que desplazarse a Sedano, y allí no podía realizar ningún ejercicio pianístico. La única opción era tocar el armonio de la iglesia. A Alejandro se le ocurrió construir un ingenioso teclado de cartón y teclas de madera, para ejercitar su memoria.1966

Estudios musicales en el Conservatorio de Burgos

(Foto-Carta de identidad del Conservatorio Elemental de Música -Antonio de Cabezón)

Empezó el curso y Yagüe tuvo que simultanear los estudios de Magisterio con los estudios del Conservatorio. En un año académico terminó con todos los estudios de solfeo y tres cursos de piano. En días alternos, por la tarde cuando acababa su horario lectivo en la Escuela Normal de Magisterio corría directamente al Orfeón Burgalés, donde había un piano en el que podía practicar una media hora. Las partituras de música eran muy caras y su preocupación por obtener dinero le llevó a participar en varios concursos de poesía o pintura, entre otros, en los que obtuvo varios premios. Durante el curso 1966-67 el Ministerio de Educación concedió la validez oficial a los estudios musicales del Conservatorio de Música de Burgos. En tres años finalizó todos los estudios musicales que se podían cursar en el Conservatorio de Burgos. El resto de las asignaturas debía hacerlas de forma extraoficial, con clases particulares con el maestro Quesada y examinarse por libre en el Conservatorio de Valladolid. Desde el principio, Yagüe tuvo claro que quería ser compositor por lo que era muy importante centrarse en los estudios de armonía  y de piano. En octubre de 1970, una vez aprobadas las oposiciones de magisterio, le destinaron al colegio Alejandro Rodríguez de Valcárcel, ya que consiguió la mejor nota de Burgos. Su primer sueldo de maestro lo dedicó íntegro a comprarse partituras. La necesidad de aprender una buena técnica compositiva le llevó a la conclusión de que si quería continuar sus estudios debía marcharse a Madrid.1966

Su vida en el Colegio Menor

(Foto- Coro del Colegio Menor dirigido por Alejandro Yagüe curso 1970-71)

Durante un año (curso 1968-69) Yagüe fue Educador del Colegio Menor. Pero lo que realmente le interesaba era proseguir sus estudios musicales con el maestro Quesada, siendo necesario comprarse un piano. Por ello, propuso al director del Colegio Menor que le adelantara su sueldo anual y así adquirir un piano de segunda mano. A cambio fundó y dirigió el coro en el Colegio Menor en 1969. El director estuvo de acuerdo, y a partir de entonces tuvo su piano en el salón de actos donde podía estudiar hasta altas horas de la noche sin molestar a nadie En el Colegio Menor, arrancaron los ensayos del coro, siempre estaban buscando obras para cantar, en Burgos no había partituras corales. Si Alejandro las pedía a Madrid salían caras. Por eso tuvo que ponerse un pseudónimo para que nadie sospechase que él era el autor de las obras que empezaron a entonar. Se le ocurrió el nombre de "Diaghelis”, así empezó todo. Las voces de soprano y contralto las cantaba el alumnado de primero y segundo curso de bachillerato. El resto las hacían estudiantes de los cursos superiores, o de magisterio. Participaron en tres concursos nacionales de coros de Colegios Menores. En el concurso de Badajoz lograron un accésit (1969). En Zaragoza (1970) la obra obligatoria no era del gusto de Yagüe y se le ocurrió armonizarla a su manera saltándose las normas del concurso. El presidente del jurado le indicó que aunque ellos llevaban una obra más interesante que la obligatoria, quedaban descalificados. Sus coralistas se enfadaron y le abuchearon a la hora de salir al teatro. En el coro acontecían diariamente anécdotas muy curiosas. Todos los días, después de cenar Alejandro ensayaba una hora en el salón de actos.1968 - 1969

Rondalla y Coro

(Foto- Coro del Colegio Menor dirigido por Alejandro Yagüe curso 1970-71)

Ante la necesidad de cubrir gastos, se le ocurrió hacer una nueva propuesta al director del Colegio Menor. Además de llevar el coro llevaría también la rondalla. El director aceptó. Por lo tanto, mientras Yagüe preparaba las oposiciones, también llevaba la rondalla y el coro del Colegio Menor.1970

Ganando sus primeros premios

(Foto. Boletín Oficial- Premios Nacionales Fin de Carrera-)

El Ministerio de Educación presentó las bases para conceder diez premios Nacionales Fin de Carrera. Los de Magisterio estaban dotados con 10.000 pesetas.  Yagüe se podía presentar por haber conseguido Premio Extraordinario Fin de Carrera de Magisterio en junio de 1968. El Premio Nacional consistía en un examen escrito de unas dos horas sobre un tema impuesto desde el Ministerio de Educación en Madrid en el que tenía que demostrar una buena capacidad de síntesis de todos sus conocimientos relacionados con la pedagogía en general, didáctica y metodología. Era la oportunidad de solucionar su precaria situación económica. Cuando la directora de la Escuela de Magisterio de Burgos, Dolores Abelenda, le comunicó que había ganado dicho Premio Nacional Fin de Carrera, pensó que, al menos por un tiempo, no tendría problemas económicos.1968

Oposiciones de Magisterio

(Foto. Recorte Diario de Burgos- Tribunal de Oposiciones a Ingreso en el Magisterio Nacional- )

Al haber obtenido el número uno en las oposiciones en Burgos, su primer destino provisional (curso 1970-71) lo ejerció como maestro en el Colegio Alejandro Rodríguez de Valcárcel, de Gamonal, en el mismo Burgos. Las puntuaciones de cada ejercicio se daban a conocer en el Diario de Burgos En ese primer destino, Yagüe tenía a su cargo un grupo de cuarenta y dos alumnos, de seis años. Su trabajo consistía en enseñarles a leer, escribir y a realizar las operaciones matemáticas más elementales. Ese mismo curso 1970-71, en el que ejerció de maestro en Burgos, simultaneaba la tarea docente con los estudios de octavo curso de piano, último curso de la carrera de piano. Continuó interno en el Colegio Menor, donde tenía su piano en el salón de actos.1970 - 1971

Foto. Retrato Alejandro Yagüe

1971

El duro camino a la excelencia

Habiendo terminado la carrera de piano como alumno libre en Valladolid en junio de 1971, Yagüe decide continuar los estudios, que se denominaban de «virtuosismo», en el Conservatorio Superior de Madrid. En septiembre viajó a Madrid a realizar la matrícula. Le indicaron que el examen de admisión era a principios de octubre y que debía presentar como obra obligada la Suite Opus 14, de Bartok. Debía darse prisa y memorizar lo antes posible esa obra pianística, al mismo tiempo que repasar el repertorio realizado durante el octavo año de piano.

 A comienzos de septiembre tenía que tomar posesión como maestro nacional   propietario definitivo en el pueblo burgalés de Santibañez Zarzaguda. Pero, ese tiempo lo necesitaba Alejandro para preparar su ingreso en el Conservatorio Superior de Madrid. Así, en el mismo día tomó posesión como maestro y pidió su excedencia. Nunca más volvió a ejercer como maestro, ya que decidió continuar con los estudios superiores de música.

Casualmente, el día que le admitieron en el Conservatorio Superior de Madrid, su padre murió.

Durante ese curso académico se traslada una vez a la semana desde Burgos hasta Madrid en autobús, para asistir a las clase de piano que impartía en el Conservatorio el pianista Pedro Lerma. Simultáneamente, Alejandro seguía en Burgos las clases de cuarto curso de armonía con Ángel Juan Quesada. Además, llevaba las actividades musicales del Colegio Menor donde continuaba como huésped pudiendo tener su piano en el salón de actos.

Alejandro decidió marcharse definitivamente a Madrid para realizar los estudios superiores de Composición, dirección de orquesta y piano. Su idea era pagarse los estudios musicales fundando y dirigiendo coros en algún Colegio Mayor, igual que hacía en Burgos. Un importante centro docente en Madrid se mostró interesado por su propuesta. En octubre de 1972 se trasladó a la capital.

Además,  en el Real Conservatorio Superior de Música de Madrid se matriculó de piano (9º curso de virtuosismo), de preparatorio de dirección de orquesta, de primero de contrapunto y de primero de Composición. Durante estos años fundó un coro de hombres en la Academia José Antonio. Yagüe utilizó el piano del salón de actos de esta Academia.

En 1976 a Alejandro le comunicaron que había obtenido  una beca para ir a estudiar a Italia. Entonces, le comunicó al profesor titular que se presentaba al examen final de dirección, ya que al curso siguiente se marchaba a Roma. Eso suponía acabar un año antes que sus compañeros de promoción. Alejandro tuvo que aprender parte de los números de la “Historia del Soldado” de Stravinski y dirigir parte del concierto número dos para piano y orquesta de Chopin. Acabó así estudios de dirección de orquesta con directores de la primera promoción.

A Alejandro le concedieron al mismo tiempo la beca Juan March y la beca para ser pensionado dos años en la Academia Española de Bellas Artes en Roma. Tuvo que renunciar a la beca de la fundación Juan March.

Etapa en Roma

(Foto. Tarjeta de Identidad del Pensionado Academia Española de Bellas Artes de Roma)

El día de Santa Cecilia de 1976, Alejandro llegó a la Academia Española de Bellas Artes de Roma. Visitó al prestigioso compositor Goffredo Petrassi. Antes de la entrevista, Yagüe y Petrassi ya habían estado en contacto a través de cartas y escritos. Algunas de sus obras (que realiza como alumno) se estrenarán en la Academia Santa Cecilia. Aunque para poder costearse los gastos que le ocasionan los estudios, decide aceptar un  trabajo como  pianista en escuela de ballet de Roma. En los veranos de los años 77 y 78, coincidiendo con su permanencia en Italia, acude a la  Accademia Chigiana. Alejandro recibe clases del compositor y director de orquesta Franco Donatoni. En el segundo año es becado por dicha academia.1976

Foto. Retrato Alejandro Yagüe

1978

Su periplo alemán

En septiembre de 1978, Yagüe se traslada a Munich, ya que recibe una beca de Intercambio del Ministerio de Asuntos Exteriores. Se alojará en el Spanisches Kolleg.

Allí realiza el ingreso en el estudio de música electroacústica de la Musikhochschule (Conservatorio Superior de Colonia). Ese mismo año gana el concurso de composición de Córdoba (Premio Arte).

En 1979 le conceden la Beca Humboldt.  Durante unos meses va a Rotenburg of the Tauberg al curso de lengua alemana. El día 10 de diciembre de 1980 tuvo lugar en Madrid, en el teatro del Círculo de Bellas Artes, el fallo del I Premio de Composición para Orquesta de Laudes que bajo el patrocinio de la Dirección General de Música, organizó la Sociedad Artística Riojana. El tribunal dio como ganadora la partitura titulada “Bardulia” compuesta por Alejandro Yagüe.

Mientras continuó su estancia en Alemania, obtiene un nuevo éxito en un concurso nacional por su obra polifónica “Cantus Firmus nº 3” basada en tres motivos populares burgaleses recogidos en el Cancionero de Olmeda. Se trataba del I Concurso de Obras de Polifonía juvenil convocada por el Ministerio de Cultura Español.  Posteriormente, una vez instalado en España, recibirá diversos premios en concursos celebrados en Barcelona (1983) y en Zamora (1984).

En su estancia en Alemania del 78 al 82 realiza un voluminoso trabajo de música electrónica, que en aquella época es desconocida en España por no existir ningún estudio ni ninguna sala para su audición. La obra se titula “Todo lo Cría la Tierra” y hace mención a una canción de siega que se encuentra en la página 48 del Cancionero del P. Olmeda. El hecho de que una obra de música contemporánea, concretamente música electrónica, tome como premisas un texto popular es algo excepcional. En el estudio de Colonia hizo posible transformar y modular la voz humana,  logrando sonidos que son desconocidos y que en la práctica ningún coro puede conseguir.

1982

Vuelta a España

El 27 de abril de 1982 Yagüe regresa a España. En octubre se convoca una plaza de profesor de solfeo en el Conservatorio Profesional de Burgos y la consigue. Empieza enseñando Solfeo (principiantes) piano (iniciación) y formas musicales. Era su primer trabajo dedicado a la música.

 Pronto empezaron a aparecer problemas con el director del Conservatorio.

En su afán por la enseñanza democrática decide que se haga nombramiento de una persona entre el alumnado que haga las funciones de delegado. El primer día se hizo una votación en la que fue elegida una alumna como delegada de curso. A los pocos días hubo que anular dicha votación, por presiones con la dirección.

Alejandro empieza a realizar conciertos mensuales del alumnado. También envió a estudiantes a la radio local para que hablasen sobre temas musicales, y así dar a conocer la actividad del Conservatorio. Además, el alumnado empieza a acudir a los Conciertos de la sociedad Filarmónica. Otra de las actividades que incluye son audiciones musicales para personas mayores. En 1987, inicia un estudio sobre las instituciones musicales burgalesas junto con el alumnado del Conservatorio. Los trabajos se publicaron en Diario de Burgos los domingos, durante 1988.

Foto. Retrato Alejandro Yagüe

Foto. Retrato Alejandro Yagüe

1987

Problemas con el conservatorio

En 1987 Yagüe se presenta a las oposiciones de Armonía del Conservatorio Municipal de Burgos. A pesar de todas las trabas, logró aprobar la oposición.

Alejandro empieza en octubre el nuevo curso. Tiene ilusión por impartir la asignatura de armonía en el Conservatorio de Burgos. El director del conservatorio le indica que únicamente impartirá esa materia al primer curso.

Yagüe no acepta la situación, ya que él ha aprobado la oposición. Va a Madrid. Habla con el Inspector Jefe de Conservatorios Españoles y le pregunta si es obligatorio el Consejo Escolar en el Conservatorio de Burgos. Le indica que es obligatorio, pero que si lo denuncia va a tener muchos problemas. Aun así, decide denunciar por escrito la falta del obligatorio Consejo Escolar en el Conservatorio Profesional de Burgos. Pero pasa el tiempo y el Ministerio de Educación no se pronuncia.

La Fundación Humboldt le invita a asistir a una reunión de antiguos becarios en Alemania. Queda de acuerdo con el alumnado de Burgos en la forma de recuperar las clases y se marcha a Bonn.  El día 21 de enero de 1988 vuelve a España. El día 23, recibe un escrito urgente que le dice que su ausencia al trabajo es una falta muy grave que da lugar a la escisión de su contrato.

Pasado un tiempo, el juzgado número dos de Burgos se pronuncia al respecto y dictamina que el verdadero motivo del despido tuvo su origen en los escritos dirigidos por el profesor Yagüe a la dirección provincial del MEC y a la Inspección General de Conservatorios, en los que denunciaba irregularidades en el centro. Por ello, se ven obligados a readmitirle, pero Yagüe en ese periodo de tiempo se había preparado las oposiciones para el Conservatorio Superior de Salamanca, donde toma posesión el 1 de octubre de 1988, y donde ejercerá como Profesor Catedrático de Composición hasta su jubilación.

Aun así, mantiene muy buena relación con el Coro de la Universidad de Burgos, con la Banda de Música Ciudad de Burgos y otras corales de la ciudad como la de San Esteban, el Orfeón Burgalés y otras tantas de la capital y provincia. El Coro Interludio, que se funda en el otoño del 1998, graba un CD con los ocho cuadernos de los que consta la obra “Spanish Folk Songs” de Alejandro, con las que, además, obtiene importantes Premios Nacionales. También mantiene una especial relación con la Schola Cantorum. En el 2005 le nombran Socio de Honor.

Últimos años de su carrera

En la ciudad de Burgos se le reconoce como Báculo de Oro. Igualmente, Alejandro recibe el premio “Ciudad de Burgos a la Creatividad” de la mano del Ayuntamiento en colaboración con el Plan Estratégico. También recibe el reconocimiento de Buen Vecino de la Ciudad de Burgos.

La Asociación Cultural Las Calzas se une a los reconocimientos en 2013, destacando el trabajo musical de Alejandro y su proyección exterior y ser un referente en las especialidades de composición, dirección de orquesta y piano.

También, asiste como jurado durante sus tres últimas décadas, al Certamen de la Canción Marinera en San Vicente de la Barquera. En el 41º Certamen (año 2008) la obra titulada “Dos Olas” de Alejandro Yagüe es la obra obligatoria. Asimismo, asiste como jurado a concursos de gran repercusión, entre los que destaca el Certamen Coral de Ejea de los Caballeros. La obra obligatoria en el 39º concurso del año 2009, “Dibujo en el Agua” es escrita y compuesta por Alejandro.

Se presenta a un certamen Internacional de Composición con la obra para coro mixto Pater Pauperum y es seleccionada como finalista del XII Concurso Internacional de Composición Coral Seghizzi de Gorizia (Italia).  En octubre del 2015 obtiene el primer premio en Suiza en el Concurso Internacional de Composición Europa- Cantat para obras policorales con acompañamiento instrumental y de órgano, por su obra “Migratio” para doble coro con cuarteto de trombones. En julio del 2016 el creador burgalés gana el tercer premio del concurso Internacional Diabelli Contest con la pieza “Nec Sol Lucebat” defendida en Alemania por el coro Chismos Chor.

Foto. Alejandro Yagüe

Foto. Alejandro Yagüe

Legado eterno

El día 6 de junio de 2013 en una consulta rutinaria médica le detectan un cáncer. A pesar de ello, continúa componiendo y mostrando sus grandes cualidades humanas.

El compositor burgalés Alejandro Yagüe fallece el día 24 de agosto del 2017 a los 70 años de edad, dejando tras de sí un inmenso legado musical. A pesar de ello, nadie muere mientras permanezca viva su música, su arte y su persona.